¿Qué ha pasado en Cuba con el níquel, que al inicio del siglo XXI era la mayor fuente de divisas del país con 2,000 millones de dólares anuales y más?

¿Por qué Indonesia desde 1960 ha multiplicado por 28 su producción de níquel y obtiene hoy 560,000 toneladas (2019), y Cuba desde 1958 la incrementó solo 2.8 veces y produce 51,000 toneladas (2019), 11 veces menos, pese a ser el cuarto país del mundo en reservas comprobadas de níquel, según el Servicio Geológico de EE.UU (USGS) y Nickel Investing  News (NIN)

Cuba, que era uno de los mayores productores de níquel, ahora ocupa el noveno lugar. Filipinas con 340,000 toneladas le sigue a Indonesia, y Rusia en tercer lugar, con 210,000 toneladas.  Y Guatemala cuadruplicó su producción desde 2009 y ya le pisa los talones a Cuba con 49,000 toneladas.

Cuba tenía en 2017 reservas probadas de 5.5 millones de toneladas de níquel

Lo más significativo es que la isla supera en riqueza niquelífera a los dos campeones en producción.  De acuerdo con NIN y USGS, Cuba tenía en 2017 reservas probadas de 5.5 millones de toneladas de níquel, mientras Indonesia y Filipinas tenían 4.5 y 4.8 millones de toneladas, respectivamente. Rusia es también el tercer país en reservas con 7.6 millones/ tm, solo superada por Australia (19 millones/tm) y Brasil (12 millones/tm).

Estas estadísticas sugieren que Cuba hoy podría fácilmente producir más de 300,000 toneladas anuales de níquel, seis veces más.

Se trata de un metal casi precioso, imprescindible para obtener  acero inoxidable y otras aleaciones resistentes a la corrosión.  Y el cobalto, que se extrae junto con el níquel, es vital para fabricar motores de avión, baterías para teléfonos móviles y automóviles, etc.

El Estado castrista opera sin participación extranjera una planta de níquel, la Comandante Che Guevara, en Moa; y otra también en Moa, la Pedro Soto Alba, (construida en 1957 por una compañía de EEUU), pero al 50%  con la compañía canadiense Sherrit International,   con la que conforma la empresa mixta  Moa Nickel S.A. desde 1994.  Una tercera planta, la René Ramos Latour, de Nicaro, fue cerrada definitivamente en 2012.

En vez de tener más capacidad instalada, la industria niquelífera cubana tiene menos

En fin, en vez de tener más capacidad instalada, la industria niquelífera tiene menos.  En la primera década del presente siglo el promedio de la producción cubana de níquel fue de 74,000 toneladas, y en 2011 produjo 72,530 toneladas. Pero ahora la meta es llegar a las 50,000 toneladas.  Ya el régimen no ofrece cifras exactas de los ingresos por las exportaciones de níquel, pero se sabe que hoy ronda los $550 millones.  El principal cliente es China, luego Europa y Canadá.

El costo de producción de níquel en Cuba es muy alto

Es cierto que con la crisis económica internacional iniciada en 2008 el precio del níquel se desplomó y en 2009 cayó a $10,000 la tonelada. Eso afectó a Cuba, al punto de que José R. Machado Ventura, informó que si el precio bajaba a $9,000 sería incosteable producir dicho mineral en el país. Luego el precio se recuperó y en 2011 fue de $22,204 dólares.

Lo que Machado Ventura no dijo fue que el problema es que en Cuba el costo de producción niquelífera es uno de los más elevados del mundo. Se gasta mucho petróleo por cada tonelada de mineral. A ello se suma la bajísima productividad y eficiencia y el desgano y desinterés de los trabajadores, típicos del socialismo, agravados por el malvivir de todos ellos.

El níquel se llegó a cotizar a $54,000 dólares la tonelada en mayo de 2007, en el London Metal Exchange (LME). Una Cuba sin comunismo habría podido exportar hasta 300,000 toneladas de níquel por un valor de $16,200 millones de dólares, un ingreso 8.5 veces superior al del turismo en 2007, que fue de $1,900 millones.

La economía de mercado multiplicó casi 30 veces la producción indonesia

El 23 de junio de 2020 el precio del níquel, con pandemia y todo, subió a $18,785/tm, luego de Indonesia anunciar que limitará sus exportaciones al comienzo de 2021, lo que se espera hará caer la producción mundial en un 15.4% en lo que resta de 2020, y apuntalará el precio.

Pero lo más importante y significativo de todo esto es que en 1960 Indonesia produjo 19,753 toneladas de níquel, y Cuba en 1958 produjo 18,000 toneladas. O sea, en 60 años en la nación asiática la economía de mercado multiplicó casi 30 veces la producción de níquel, y en la Cuba liberada del imperialismo” no se produce ni tres veces lo que, a mediados del siglo pasado, pese a que alberga en su suelo más níquel que los dos gigantes productores.

La cúpula castrista sigue buscando inversionistas extranjeros que inviertan en la industria del níquel. Pero todo inversor capitalista tiene bien desarrollado su olfato empresarial para saber qué garantía de éxito puede tener su inversión.  Y Cuba no ofrece ninguna.

En síntesis, sin castrismo seguramente se habrían podido invertir en Holguín miles de millones de dólares y hoy Cuba sería uno de los mayores productores y exportadores mundiales, con ingresos megamillonarios en divisas.