CONFLICTOMETRO MARZO

SUMARIO

  • En el mes de marzo se produjeron 184 manifestaciones públicas de protesta, de estas 146 (79%) estuvieron vinculadas a derechos políticos y civiles. Mientras que 38 (21%) estuvieron relacionadas con derechos económicos, sociales y culturales.
  • Las protestas aumentaron un 15% con relación al mes de febrero (de 159 a 184).
  • Más de 5 protestas diarias se produjeron en el mes de marzo en toda la isla.
  • Se consolida una nueva conciencia: el bloqueo interno ha sido el más prolongado y dañino.
  • El incremento de las protestas políticas en un 31% en un mes está vinculada la represión y faltas de libertades fundamentales. Adicionalmente la carencia de alimentos, medicinas y el bajo poder adquisitivo de los salarios se achaca directamente a la mala gestión gubernamental. En otras palabras, la ineptitud administrativa sumada a la represión ha politizado las protestas en instantes en que el capital simbólico –credibilidad, prestigio e influencia– del gobierno cubano está en bancarrota.
  • Se mantiene la tendencia de que la represión lejos de contener las protestas las incrementa y radicaliza. Las multas injustas contra cuentapropistas y medidas arbitrarias y abusivas, así como el destierro de la periodista Karla Pérez multiplican las protestas.
  • Las contramedidas del gobierno (canciones, caravanas de autos y otras) fracasan, hacen el ridículo y generan burlas.
  • Las manifestaciones públicas de protestas se producen por distintos sectores de la población: campesinos, artistas, médicos, religiosos, cuentapropistas, mujeres, jóvenes, veteranos, profesionales e intelectuales.
  • Se ha fomentado la solidaridad intersectorial de la sociedad civil y de ese modo creado capital social ciudadano
MANIFESTACIONES
PÚBLICAS DE PROTESTA
TOTAL Por motivos económicos
y sociales

Por motivos políticos
y civiles

2021
Marzo

184

38

146

Febrero

159

48

111

Enero

137

58

79

2020
Diciembre

122

26

96

Noviembre

110

19

91

Octubre

88

33

55

Septiembre

42

16

26

MÁS DE 5 PROTESTAS DIARIAS ANTE UN GOBIERNO EN BANCARROTA

Sobrepasar las cinco protestas diarias en un país democrático no tendría relevancia. El hecho de que se produzcan en un país totalitario donde cualquier expresión de disenso tiene graves consecuencias porque un cubano que proteste puede ser privado de libertad, de empleo, de acceso a centros de estudios, sufrir actos de repudios por hordas paramilitares, arrestos arbitrarios, vigilancia ilegal o ser castigado con multas mayores al salario mensual significa que el gobierno cubano ha perdido la principal herramienta de control de la población: el miedo.

Lo que falta para que estas protestas se multipliquen y produzcan un cambio en la sociedad cubana es la esperanza de un futuro mejor que el gobierno ya no puede vender.

Tener hambre en Cuba también es un delito. Un anciano cubano identificado como Ángel Granado Santiesteban, oriundo de Mayabeque, fue multado con 2,000 pesos por la policía luego de gritar “tengo hambre”. ‘Tengo hambre, no hay nada que comer, debí haber muerto” fue la frase que le costó la multa. El salario mínimo en Cuba es de 2,100 pesos y no alcanza para cubrir la canasta familiar. El mes de marzo cerró con un joven carretillero que se suicidó por una abusiva multa que no podía pagar. Foto: Cubanos por el mundo

 

Las protestas y la represión han puesto en crisis el capital simbólico –credibilidad, prestigio e influencia– del gobierno cubano

La torpe respuesta del gobierno cubano al incremento de las protestas ha devaluado con suma rapidez y de forma significativa el capital simbólico que había construido cuidadosamente desde 1959.

La percepción positiva de que Cuba representaba una revolución popular se ha transformado dramáticamente desde noviembre del año pasado. En apena cinco meses se ha derrumbado el capital simbólico del régimen cubano que fue construido y acumulado en más de medio siglo por instituciones estatales como el ICAIC, Casa de las Américas, la Nueva Trova, entre otros. Frente a ellas, la sociedad civil ha construido su propio capital simbólico al promover una contracultura democrática y anti totalitaria como es el caso de la canción Patria y Vida que ya cuenta con más de 4 millones de visualizaciones y se ha convertido en un himno de rebeldía.

Artistas del 27N diseñan camisetas con el mensaje “NTV Miente”.

La multiplicidad de sectores abocados a las protestas (artistas, campesinos, obreros, emprendedores, animalistas, militares), su visibilidad en las calles y redes sociales, la innegable raíz ciudadana y humilde de sus portavoces y la creatividad que ha desplegado la nueva generación de artistas independientes a la hora de expresarlas han marcado una nueva etapa de insubordinación.

La represión no contiene las protestas, sino que las multiplica y radicaliza. Sus contramedidas fracasan

Las multas abusivas, las detenciones arbitrarias, los tribunales dóciles con sanciones sumarias, las golpizas a ciudadanos pacíficos y desarmados, las confiscaciones arbitrarias de bienes no logran sumisión, sino que incentivan la rebeldía.

En este mes se ha desnudado aún más la disfuncionalidad del gobierno que al parecer es incapaz de establecer prioridades y actuar de forma coherente para alcanzarlas. Ello se refleja en la incapacidad de la elite de poder para proyectar confianza externa en el acatamiento gubernamental de las leyes y Constitución del país.

Ese hecho –la degradación de su capital simbólico frente al mundo– también afecta gravemente su capacidad de reconstruir su capital financiero para enfrentar la actual crisis económica. Los inversores no arriesgan capital en un país que no tiene instituciones y un sistema legal legítimos ni honra sus compromisos.

Pocas veces ha sido esa realidad tan transparente como cuando decretaron el destierro de la joven cubana Karla Pérez al viajar de regreso al país después de cuatro años de estudios de periodismo en una beca en Costa Rica –a donde tuvo que marcharse por haber sido expulsada en 2017 de la Universidad de Las Villas por sus “desviaciones ideológicas”. Unos días antes el gobierno cubano había hecho un llamado a los “emigrados” para que invirtieran en Cuba (siempre que fuese en ciertos sectores y en escalas menores). La abominación legal del destierro de Karla ha puesto al desnudo la total ausencia de garantías legales mínimas para poder confiar en esa invitación inversionista.

La declaración pública de un conocido artista cubano “A la Cuba mía sí puedes entrar”, fue convertida en marco de fotografía de perfil en la red social Facebook.

Activistas repartieron hojas impresas, volantes, en las provincias de La Habana, Camagüey, Santa Clara, Sancti Spíritus, Artemisa y Pinar del Río, con pensamientos de los fundadores de la nación cubana cuyas ideas, dichas en el contexto actual, adquieren nuevos significados subversivos. Curiosamente, la policía  detuvo a personas  que repartieron impresos con pensamientos de Martí y Maceo. Si antes los detenían por distribuir la Declaración Universal de Derechos Humanos encarcelar a un joven por leer en público poemas del Apóstol de la Independencia es patético.

La contraofensiva gubernamental (caravana de autos oficiales dotados de gasolina en medio de la escasez y la promoción de canciones de respuesta a Patria y Vida) se ha basado en acciones y mensajes tradicionales, desgastados. Han fracasado. Muestra de ello es la canción Patria o Muerte por la Vida que ha alcanzado apenas  7mil Likes a pesar de todo el esfuerzo propagandístico y ha superado la cifra  103,000 Dislikes “No me gusta”. Además de que los comentarios se convirtieron en un foro de burlas. Para empeorar las cosas para el gobierno, el verso “a la Revolución le queda más de 62 milenios” se convirtió en centro de memes y chistes durante todo el mes.

Innumerables burlas a la canción respuesta de Patria y Vida. El capital simbólico de la “Revolución Cubana” está en bancarrota

El gobierno está desconcertado ante la ofensiva popular. Maniobra, recula, hace concesiones parciales y en ocasiones concede todo lo que demandan las protestas.

Una línea constante de la propaganda gubernamental es que nada se consigue con protestar salvo ser reprimido. Si se ha demostrado ya que era una falacia que los cubanos no se atrevían a protestar ahora se está demostrando que es también una falacia que el gobierno nunca cede ante la presión popular. En varias ocasiones anteriores pero también en este mes de marzo el gobierno dio marcha atrás a su tozudez.

Las protestas –e incluso la amenaza de que se iban a realizar– durante el mes de marzo obligaron a policías e inspectores a revocar varias multas y confiscaciones a cuentapropistas, al Ministerio de Agricultura a comenzar a pagar las deudas que se debían a campesinos (pese a que fueron inicialmente atacados por boinas negras), a archivar el juicio contra la activista del 27N Carolina Barrer, a arreglar dos solares anegados de aguas albañales por varios meses, entre otras.

El insidioso mensaje derrotista del gobierno, constantemente trasmitido por medio de agentes de influencia dentro y fuera de Cuba, ha quedado desmentido: el cubano pierde el miedo, protesta e incluso gana. ¡Sí se puede!

El movimiento de protestas ha fomentado la solidaridad intersectorial y creado capital social ciudadano

La elite de poder cubana debe haber recordado en estos meses la consigna guevarista de “crear dos, tres muchos Vietnam”. Su tarea en el pasado reciente era relativamente fácil. Controlar unos pocos miles de opositores políticos, agrupados en organizaciones que ellos tenían, por lo general, penetradas. El panorama ha cambiado.

Ha emergido una sociedad civil autónoma con múltiples demandas, pero inevitablemente enfrentadas a un estado totalitario que pretende ningunearlas. Sí esa razón no fuese suficiente para perder el sueño en los medios de la Gestapo tropical, resulta ser que, adicionalmente, esas múltiples asociaciones y grupos informales de ciudadanos están generando relaciones entre ellas, “capital social”, como diría el Dr. Jorge Sanguinetty. Capital social que, al menos por ahora, no está en lo fundamental sometido a la infiltración y control de la Stasi caribeña. Y para hacer más angustiosa la situación de la elite de poder y su Gestapo, esa emergente sociedad civil tiene hoy más capital simbólico que el régimen cubano.

El Ministerio del Interior (su Dirección de Inmigración y Extranjería), por razones ideológicas, ha declarado a la periodista Karla Pérez oficialmente desterrada. Karla primero había sido expulsada de sus estudios de periodismo en la Universidad de Villa Clara «Marta Abreu»  por pertenecer al grupo Somos+,  después se ganó una beca y se graduó en esa especialidad en Costa Rica.

Se amplían las formas de protestas

Es pertinente pasar revista a la multiplicidad de formas e instrumentos empleados en las protestas. Enunciamos, a guisa de ejemplo, los principales:

  • Protestas callejeras
  • Huelgas de hambre colectivas trasmitidas por las redes sociales
  • Campañas en las redes sociales para promover o apoyar protestas personales, colectivas y/o documentar violaciones de derechos humanos
  • Enlazar de forma solidaria las protestas internas con otras en el exterior
  • Negación del pago de las multas
  • Generación y difusión masivas de múltiples productos culturales contestatarios tales como canciones, proyección de filmes de largometraje (como Plantados), memes, caricaturas, fotos, videos y pinturas.
  • Declaraciones de denuncias (videos y escritas)
  • Carteles públicos
  • Peticiones y emplazamiento público a las autoridades

Siguiendo el mismo método empleado en noviembre por el Movimiento San Isidro un grupo de activistas de la UNPACU iniciaron una huelga de hambre trasmitida en directo por internet para protestar por la represión contra sus acciones sociales humanitarias con vecinos pobres. En esta ocasión la peculiaridad fue que algunos cubanos en otras localidades, incluso en el exterior, se declararon en ayuno de solidaridad con los huelguistas.

El mes de marzo concluyó con el trágico suicidio de un joven cuentapropista, huérfano de madre y padre, que apenas se sostenía comprando viandas a los campesinos y vendiéndolas a la población urbana.

El hecho evoca al joven verdulero tunecino que, al igual que este cubano se suicidó en protesta porque la policía le decomisó la mercancía e impuso multas exorbitantes (7,000 pesos cubanos en el caso de Jorge Cachón Martínez). La muerte del tunecino dio inicio a la primera revolución de la Primavera Árabe.

La de Cachón Martínez ya ha provocado una protesta de la Liga de Campesinos Independientes y la Federación Latinoamericana de Mujeres Rurales (sección Cuba) que han hecho un llamado a todo el pueblo cubano a no pagar más multas hasta que cese la represión y se levante el bloqueo interno a las fuerzas productivas. Así cierra este mes de marzo.

Las mujeres: protagonistas de primera línea

Bien sea en el enfrentamiento a la policía en las colas, impidiendo el arresto de un cuentapropista o en la confrontación física con los llamados “agentes del orden”, la mujer cubana está en la primera fila de la confrontación con el régimen.

Las mujeres cubanas se muestran sin temor alguno enfrentándose a policías armados, brutos y brutales, en las ciudades, pueblos y campos de Cuba. Sus declaraciones en los videos de protesta contra el régimen cubano son claras y desafiantes, sin lenguaje rebuscado ni escurridizo. No muestran temor alguno a las consecuencias de sus posicionamientos. Esta incorporación masiva de la mujer cubana a la primera línea de combate a la dictadura es una magnífica noticia.

En todas las épocas en Cuba la mujer jugó un papel decisivo en el derrocamiento de regímenes de oprobio, fuese en la época colonial, republicana o totalitaria. Su firmeza siempre ha inyectado valor a toda familia cubana –esposos, padres, hijos– en cualquier momento de nuestra historia. Su renovado activismo es una mala noticia para la elite de poder.

El supuesto delito de la Carolina Barrero es haber imprimido unos versos de José Martí junto a una imagen artística del Maestro, así como defender el derecho a la manifestación y la protesta pacífica.

Se consolida una nueva conciencia: el bloqueo interno ha sido el más prolongado y dañino

¡Se acabó! Basta ya de mentiras. Lo que destruyó la tercera economía más próspera de América Latina en 1958 no fue el embargo estadounidense de 1962 sino el bloqueo estatal interno a la iniciativa privada que, paso a paso, se inició en 1961 con la declaración abierta del carácter comunista del gobierno cubano.

Es esta nueva conciencia la que también explica que las protestas contra el sistema sean masivas y las que organiza oficialmente el gobierno contra el “bloqueo” estadounidense resulten escuálidas y patéticas.

 CONCLUSIONES

  • Se ha demostrado que es una falacia que los cubanos no pueden sobreponerse al miedo y salir a protestar de forma pública.
  • La película Plantados ha despertado el interés hacia los hechos que sucedían en las cárceles cuando nadie quería escuchar las denuncias y ha fomentado una nueva sensibilidad y solidaridad intergeneracional antes inexistente.
  • El gobierno ha perdido los pilares económicos, sociales e ideológicos de su dominación. Si el poder se define como la capacidad de hacer que otros se comporten del modo que lo desea aquel que lo posee, entonces el gobierno ya ha perdido una cantidad considerable de poder. La gente no se comporta como lo desearía el gobierno.
  • El sistema o régimen de gobernanza está en bancarrota financiera y ha colapsado su capital simbólico. Solo le queda el monopolio del uso de la fuerza. Si aquellos militares que no forman parte de la cúpula privilegiada y mafiosa le retiran su apoyo negándose a ejercer la represión, el sistema entero se viene abajo.
  • Es también una falacia que no se logra nada con las protestas. El gobierno se muestra desconcertado y aturdido. Unas veces se comporta terco, pero en otras se ha replegado, hecho concesiones parciales o incluso han concedido todas las demandas.

ETIQUETAS MÁS USADAS EN EL MES

#PatriayVida
#LaColadelaLibertad
#NoMasDictadura
#NoQueremosMasDictadura
#CubaDeTodos
#CubaEsDeTodos
#NTVmiente
#NoMasRepresión


METODOLOGÍA DEL OCC ¿A QUÉ LLAMAMOS MANIFESTACIÓN PÚBLICA?

Son todas aquellas acciones, de muy diversa índole, que expresan de forma pública, sea de manera individual o colectiva, el rechazo ciudadano a disposiciones oficiales, instituciones o autoridades.

Ese rechazo y crítica pública puede ser expresión de protestas por temas políticos y de derechos ciudadanos o vincularse de forma directa a demandas populares en cuestiones sociales, económicas y culturales como son los problemas de vivienda, agua, alimentación, transporte y censura artística o intelectual.

Dichas manifestaciones pueden tomar la forma de protestas callejeras, pintadas de muros, colgar carteles, corear consignas, negarse en público a cumplir órdenes policiales o administrativas, realizar una marcha, procesión, sentada o misa no autorizada, distribuir volantes, hackear sitios oficiales o crear otros falsos, repartir publicaciones impresas o digitales prohibidas, distribuir memes y chistes satíricos de las políticas gubernamentales y muchos otros más.